Nuevas formas de medir el kilogramo, el amperio, el kelvin y el mol cambiarán a partir de 2018
La revisión del Sistema Internacional de Unidades es la mayor desde su instauración en 1960 El físico Richard Steiner con la balanza de Watt, en una foto de archivo.
La mayor revisión del Sistema Internacional de Unidades (SI) desde su instauración en 1960 se está llevando a cabo. La Conferencia General sobre Pesos y Medidas (CGPM), que supervisa el SI, redefinirá en noviembre de 2018 cuatro unidades científicas básicas: el amperio, el kilogramo, el kelvin y el mol. Los cambios entrarán en vigencia en mayo de 2019.
La Oficina Internacional de Pesos y Medidas (BIPM, por sus siglas en francés) ya ha revisado estos planes de modificación en una reunión que tuvo lugar la semana pasada cerca de París, según informa la revista de divulgación científica Nature.
Las redefiniciones de estas unidades se basarán en relaciones con constantes fundamentales, en lugar de constantes abstractas o definiciones arbitrarias, como sucede en la actualidad. Esto permitirá a los científicos que trabajan con el más alto nivel de precisión hacerlo de múltiples maneras, en cualquier lugar o momento y en cualquier escala. Además, estos cambios no afectarán a las escalas convencionales.
Nuevas unidades redefinidas por experimentos
Bajo este nuevo sistema SI, los investigadores podrán usar varios experimentos para relacionar constantes con cada una de las unidades de medida.
El kilogramo (unidad básica de masa) está actualmente definido por la masa que tiene un cilindro de platino-iridio con unas altura y dimensión específicas. Esto presenta un problema. Los objetos pueden perder átomos fácilmente o absorber moléculas del aire, por lo que, en comparación con el prototipo, se ha observado que algunas copias oficiales han ganado, al menos, 50 microgramos en un siglo. Con la nueva redefinición, el kilogramo podría medirse con la denominada balanza de Watt, un instrumento que compara la potencia mecánica con la potencia electromagnética.
El amperio (unidad de corriente eléctrica), que actualmente se define por un experimento imaginario que genera una fuerza entre dos cables infinitos, podrá redefinirse con una bomba de electrones. Con esta técnica, al atrapar electrones individuales cuando viajan rápidamente a través de un conductor, la bomba puede generar una corriente medible contando electrones individuales.